Demasiadas molestias se toma usted conmigo, para tenerme en tan pobre estima, Sr. Jódar. No obstante, me gustaría darle las gracias. Es para mí un honor recibir una respuesta tan rápida y contundente, apenas 24 horas después de la publicación en este mismo medio de un artículo en el que, únicamente, trataba de transmitirle el sentir de muchas familias lorquinas.
Muchas gracias, le repito, porque no sólo recibí el apoyo de multitud de madres y padres que leyeron mi escrito el pasado domingo, sino porque fueron muchas más las personas que me reiteraron su solidaridad tras leer su atropellada carta de respuesta del lunes, impropia del alcalde de mi pueblo.
Debería usted tranquilizarse, Sr. Jódar. La ansiedad y la precipitación no son buenos consejeros para alguien que ostenta su responsabilidad. Debe entender que estamos en democracia, y que las críticas son normales en este sistema político. No comprendo que se moleste por ello y, desde luego, sepa que su tono y su virulencia extrañaron a muchos ciudadanos, no sólo a los que votan al partido político al que me honro en pertenecer. Algunos de ellos no se explican tanto odio, créame. Mucho menos que, a pesar de la irrelevancia que usted dice conferirme, vuelva a dedicarme, una vez más, tanta pólvora en sus palabras.
Señor Jódar, no se preocupe, guardaré esta última carta en la carpeta donde conservo el resto de epítetos y calificativos que me ha ido dedicando en los últimos tiempos. La pondré junto a la citación que envió a mi domicilio particular exigiéndome que me retractase de aquello en lo que creo y que seguiré defendiendo, mis principios y valores, y a los que, le adelanto, no renunciaré jamás.
En algo tiene usted razón: los socialistas de Lorca perdimos las elecciones municipales. Señor Jódar, nosotros ya pagamos por nuestros errores. Ahora le toca a usted demostrar que está a la altura de las circunstancias. En mi caso, debería saber que jamás he ostentado responsabilidades institucionales. Soy, simplemente, un lorquino comprometido con su pueblo. Nunca he tenido el honor de representar a mis vecinos en el Pleno de la Corporación Municipal, ni de formar parte del Consejo de Gerencia de Urbanismo, como lleva usted haciendo desde hace más de una década, así que no se entienden sus reproches. No obstante, sepa que defenderé el trabajo realizado históricamente por mis compañeros alcaldes y concejales, independientemente de las diferencias de criterio que, a veces, existen en el seno de las organizaciones políticas. De todas.
Mire usted, señor Jódar, es usted un hombre afortunado. Por eso, creo honestamente que, hasta 2011, debería aprovechar su tiempo para realizar una gestión eficaz en vez de entretenerse en estas lides. Sinceramente, no entendemos su empeño en demostrar en más ocasiones de lo que sería deseable que no está a la altura de lo que Lorca y los lorquinos merecemos.
Por lo demás, no dude en que seguiré recordándole, cuantas veces sean necesarias, las múltiples facetas en las que usted podría mejorar para dirigir con más acierto el presente y el futuro próximo de nuestro municipio. Me siento obligado a ello, como socialista y, sobre todo, como lorquino.
Para entender este post:
Mi carta del domingo 13, de Julio en La Verdad:
La respuesta de Francisco Jódar, todavía alcalde de Lorca, al día siguiente en el mismo diario:
1 comentario:
Siga así don José, incansable. Un saludo de un profe de Historia muy cansado. ¿Este año no viene Morricone a Lorca? Chaíto superjefe!!!
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